Fort Augustus es un pequeño pueblo como tantos de las Highlands escocesas, pero que al estar en el extremo suroeste del famoso Loch Ness se ha convertido en un punto de interés para visitantes atraídos por la leyenda de Nessie, el monstruo que habita en las oscuras aguas del lago.
Yo esperaba ver hordas de turistas y puestos de souvenirs con todo tipo de cursilerías alusivas a Nessie, pero me encontré con muchísima tranquilidad y paisajes extraordinarios… eso sí, ni señas de ningún monstruo por ningún lado. En el pueblo hay restaurantes, posadas, una gasolinera con baños públicos, las interesantes exclusas que sirven para que las embarcaciones que navegan por el Canal de Caledonia salven los desniveles y un pequeño muelle desde donde salen barcos que realizan paseos turísticos por el lago y cuestan unas 12 libras. Es sin duda una parada obligatoria si estás recorriendo las Highlands, pero más allá de los paseos en barco o una agradable caminata a lo largo del canal no hay muchas otras actividades que hacer o lugares para visitar, por lo que un par de horas son suficientes para disfrutar de Fort Augustus y tratar de avistar, con algo de suerte, al Monstruo del Lago Ness.