En algún lugar leí que gracias a Calton Hill y sus monumentos Edimburgo era llamada la “Atenas del Norte”, además que desde aquí se tienen las panorámicas más clásicas de la ciudad por lo que decidí visitarla apenas llegué a la capital escocesa!

Al final de la concurrida Princess Street, subes unos cuantos escalones y en pocos minutos estás en la cima, desde donde efectivamente te encuentras una vista espectacular de 360 grados sobre Edimburgo. Arriba está el incompleto National Monument y el monumento al filósofo Dugald Stewart que se parecen al Partenón y a la Linterna de Lisícrates respectivamente y le dan a la ciudad el apodo que mencioné antes. La estructura más alta es la torre en homenaje al Vicealmirante Horatio Nelson y también hay un observatorio actualmente cerrado, además de un obelisco que hace homenaje a los mártires políticos del país.

Calton Hill, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, fue mi primera impresión de Edimburgo y uno de mis lugares favoritos de la ciudad. Las vistas son impresionantes y un sitio muy tranquilo a pesar de estar ubicado al lado de calles tan bulliciosas, así que es obligatoria una visita! Acá algunas fotos para que tengas una idea de lo que te encontrarás: