Hace exactamente una semana publiqué las fotos de una manifestación de venezolanos en Barcelona que le querían enviar un mensaje al mundo sobre lo que estaba pasando en el país. Han pasado los días pero… ¿han mejorado las cosas? No. De hecho, están peor. Desde entonces más jóvenes han sido asesinados, encerrados en prisiones, reprimidos y torturados brutalmente. La escasez de derechos humanos se suma ya a la de la leche, azúcar, aceite o papel higiénico y el gobierno no para de criminalizar e incluso ridiculizar la protesta. No se han abierto investigaciones que aclaren las muertes por armas de fuego, sólo se ha encarcelado al líder opositor Leopoldo López y la única condena categórica ha sido por la destrucción de un par de unidades de transporte.

Se han repetido las marchas de bando y bando, pero contrario a lo que pensaba, la protesta no se ha debilitado y dudo que esto vaya a acabar pronto. Ya expliqué en mi post anterior mis razones y mis opiniones, sólo que en estos últimos días veo que ha cambiado un poco la visión en el extranjero sobre la situación. Ya el gobierno no cuenta con esa simpatía de todos por ser anti-imperialista y socialista… cualquier ideal que tenga que imponerse sobre otro con balas pierde adeptos y genera repulsión… la gente sabe que están pasando cosas malas y se preocupan, se horrorizan.

Yo no creo que esto se vaya a arreglar en un futuro cercano… de hecho tampoco sería bueno, los ánimos de revancha son tales que un cambio de gobierno traería una cacería de brujas y un espiral de violencia tal que repetiría el ciclo una y otra vez. Lo que sí quiero es que terminen de una buena vez las muertes y las agresiones, que se encuentren responsables y se asuman responsabilidades, que la gente de mi país tenga la tranquilidad y la vida digna que se merecen. Quiero dejar de leer y escuchar los disparates que dicen muchos de mis amigos y llegue la cordura. Si van a imitar algo del oficialismo, sea la definición clara e inquebrantable de sus ideales (pero me refiero a ideales más sensatos y beneficiosos, claro está) y por una vez se pongan todos de acuerdo en cual es el objetivo a seguir y luchar pacíficamente hasta conseguirlo.

Estas son algunas fotos de la manifestación del día 22 de febrero en la Plaça Catalunya de Barcelona. Una concentración mucho mayor que la del domingo pasado… por lo que me alegra que cada vez los venezolanos en el extranjero nos preocupemos e involucremos más. Nuevamente aplaudo el esfuerzo de los organizadores y colaboradores, la creatividad de los asistentes y la participación, cada uno a su manera, de las personas que nos reunimos para mostrarle al mundo que está pasando en Venezuela.

Como decían algunas consignas… lejanos, pero no ausentes.